PORQUÉ EXISTE EL PERDÓN
Mucho se ha hablado sobre el perdón y la forma de perdonar para estar libres de lo negativo, pero muchas veces no alcanza con los conocimientos que podamos tener, más bien se necesita practicar: perdonando, así como pidiendo perdón es que uno aprende a realizarlo, porque detrás de cada acto que se realiza en la vida siempre hay pequeñas o grandes chispas de ofensas o agresiones ya sean dichas, hechas o pensadas contra otras corrientes de vida, contra objetos, situaciones o contra la vida misma.
Debemos recordar que en el correr del día continuamente estamos pensando y con ello sintiendo “cosas” que según nuestras creencias pueden quedar arraigadas en nuestra mente -subconsciente e inconsciente- durante mucho tiempo como simples recuerdos (cuando son buenos) o como “grandes broncas” (cuando son malos) y tenemos que darnos cuenta que todo aquello en que ponemos nuestra atención se puede atraer a nuestra vida, estos recuerdos o estas broncas pueden y se van a repetir a lo largo de los años, de similar manera, por eso es que a partir de ahora tendríamos que CUIDARNOS de lo que pensamos, lo que sentimos, lo que hablamos y como actuamos cada día y a cada instante de nuestra vida.
Pero que sucede con lo anterior? Aquí entra la famosa LEY DEL PERDÓN: de dónde sale y a qué nos conduce.
Todos sabemos que en nosotros existe una parte muy material que es todo lo que nos rodea y una parte Espiritual a la que naturalmente no recordamos salvo cuando estamos en una dificultad o todo puede ir muy mal. Pero deberíamos recordar que uniendo la parte Divina con la parte humana lograríamos todo y es allí de donde partimos con la Ley del Perdón.
En DIOS siempre existe el Perdón para con cada uno, ya que Dios es el Gran Perdonador, nos permite vivir como nos place y nos Ama igual, nos permite equivocarnos y hacerle mal a los demás y a pesar de ello nos Ama igual, ya que sabe que tarde o temprano nos vamos a dar cuenta que es mejor ser Buenos, es mejor ser Felices, es mejor ser Buena Gente con nosotros mismos y con los demás pero para ello cada uno debe darse cuenta que puede equivocarse y al equivocarnos tenemos que pedir perdón para poder avanzar. Pobre de aquellos e incluso de nosotros cuando no comprendemos que también en nuestros errores está el aprendizaje del Perdón. Trata de hacerlo a tu manera o como lo hacemos en clase de la forma que sea pero inténtalo:
PERDONANDO a todo aquel que te hirió,
PIDIENDO PERDÓN a todo aquel que agrediste y
PERDONÁNDOTE ya que si hubieras sabido esto no lo hubieras hecho.
Ayúdate que Dios te ayuda siempre y píde al Dios que vive en tí que con la LEY DEL PERDÓN aprendas a Librarte de los errores pasados de manera que tu futuro sea promisorio de mucha felicidad y de opulencia y gracias continuas. R